AULLANDO A LA LUNA: abril 2012

sábado, 14 de abril de 2012

LLuvia

- No debería enojarse tan fácilmente, va a envejecer antes de tiempo. Y además a usted le conviene que regresé mal ahí dentro, así asegura su trabajo. Yo estoy disfrutando mi nueva libertad. Le dije a la enfermera del portal de entrada, mientras miraba el cielo oscurecido y cientos de gotas galopaban por mi cara y el resto de mi cuerpo. Evitando pensar en algo más que en las gotas de lluvia y en tener mas de 2 metros de espacio hacia la izquierda o la derecha; y disfrutando plenamente el estar sostenido sobre mis piernas.

La enfermera ya no dijo nada, yo cerre los ojos y unos instantes después la lluvia cesó su gorgojeo sobre mí. Me sorprendió y abrí los ojos para descubrir el esqueleto metálico de un paraguas respaldado por la misma oscuridad de antes -pero sin las gotas cayendo sobre mi-, baje la mirada y busque a Becky, pero solo me encontré con sus ojos tristes y llenos de algo que asocié con la lastima. La odié por el segundo que me tomo llevar mi mano sobre la de ella que sostenía mi paraguas. Entonces cambió, cambiamos; ella me amó con sus ojos y yo la amé más aún de lo que ya la amaba.

Me entrego el paraguas, y yo lo cerré despacio, lo apoye en el suelo y disfrute de nuevo de la lluvia. Ella suspiro, y volvió a cubrirme esta vez con el que la cubría a ella. Volví enteramente mi cuerpo hacia ella que ahora era quien se mojaba, solté el paraguas de mi mano y la lleve junto a la otra sobre la suya que sostenía el paraguas y me acerque hasta que los dos estuvimos protegidos. Evitando mirarla pero mirándola.

Ahí estábamos juntos después de tanto tiempo por culpa del accidente que casi me cuesta la vida, y del cual Becky se sentía responsable -ella manejaba- pero no había sido ella la que invadió el carril contrario a 160 Km/H sacandonos de la carretera y estampando la puerta del pasajero donde yo iba contra un poste. Fue mi mejor regalo de cumpleaños en mucho tiempo, solo yo salí con algo más que unos moretones. Olive y Becky estaban bien, y yo pasaría los siguientes 3 meses de vacaciones y con la posibilidad de no poder mover mi pierna derecha.

No sé cuanto tiempo pasamos así, solo viendónos el uno al otro. Y Becky tenía otra mirada que no entendía pero sabía que era, sin mucha resistencia baje el paraguas y también la lluvia nos unió no solo el cielo. Ella alzo la vista y nadie excepto yo hubiera notado su copioso llanto con toda esa agua rodeandonos. No la pude dejar así contra el cielo, lleve mis manos hasta su cara para moverla y volver a vernos, luego solo una la apoye en su nuca y la acerque a mi hombro. Y tras el primer sollozo audible la abrace aun con más fuerza.

Luego dejo de llorar, y lentamente la aleje un poco -solo un poquito- de mi y la bese en los labios. O ella me beso a mí, no lo sé, solo sé que juntamos nuestros labios mientras gotas de lluvia nos rodeaban, y estábamos por fin juntos, se fue el frío, el miedo, el dolor, la desesperación. la frustración. Y ese sentimiento de libertad de una nueva vida, nos junto y se multiplico dentro y alrededor de nosotros.

Y la lluvia cesó y el cielo despejado nos regalo galaxias enteras, mientras la luna nos iluminaba las tontas sonrisas de niños haciendo travesuras que aún mantenemos.

jueves, 12 de abril de 2012

Declaración

Yo podría amar a cualquiera que me quisiera solo un poquito más de lo que en mi familia actualmente me quieren. No pido mucho y realmente lo doy todo.

Y cuando digo todo, es todo: lo bueno y lo malo, porque soy humano y no soy perfecto. Y puede que no me tomes, pero a fin de cuentas siempre me dejan. Y así soy sincero y rudo, no puedo evitarme. Pero si me enamoro casi a díario de alguien diferente, puedo enamorarme de una sola persona cada día. Y a veces no un poco más, pero nunca un poco menos.

No podría prometer cada segundo de todo el resto de mis días, pero si todo el tiempo que tenga disponible por mi voluntad y el que me haga mover para ayudarle. Y llevarle conmigo aún ausente, donde mi mente me deje.

Y aunque me vea mal, porque no estoy pasando el mejor momento de mi vida; quiero arreglarme un poquito con esto y mejorar la de ambos. Soy un manojo de inseguridades, miedos y complejos; quizás no sepa amar como quieras, pero voy a amar lo más que pueda. Y hoy que tengo la oportunidad, prefiero no callar una vez más....