Looper loops (rellenar las inconsistencias)

CirclesLove

Empiezo estas letras, tratando que sea una historia de amor. Y espero que entiendan, que algunas veces el amor es tan grande que hasta las cosas simples pueden doler mucho y ese dolor se transforma en algo parecido al odio. pero no deja de ser el amor, la fuerza que lo creo.

Primera Parte

Fue la juventud la que los ultimó. Y el miedo lo que los enterró medio vivos.
Él se quedó solo, con el remordimiento por sus errores
Ella, encontró otros lugares donde estar mejor.

Pasaron años (2), cuantos años¿? ... Años antes de encontrarse otra vez. *Ella lo decidió*
Pero esta vez, lograron acercarse y quedarse juntos, por un tiempo quizás más largo, quizás más corto. Pero juntos en verdad, y los recuerdos son los que no les acomodan el tiempo.
Y algo falló, el silencio *desidia*. Ninguno ganó. Fue el silencio quien gano terreno donde no debería: en la confianza, en el deseo de ella de ayudar, en el desencanto de él por ser ayudado, en el amor. Y fue el que volvió a ser cenizas del fuego.

Se repitieron,
Él se quedó con el remordimiento por sus errores
Ella, ella encontró lugares mejores.

Segunda Parte

Pero el amor a veces es de esas llamas que se mantienen vivas, a veces incontrolable, creciente. A veces como suele pasar y no lo vemos.

Él decidió, conocerla de verdad, conocer la verdad.
Ella, callar y no ser lastimada.

Y un muro de hielo surgió...re-surgió... Tan frío como suelen ser, pero eso no les impide caer.

Pues como 2 polos opuestos, que son ambos, se atraían, se llamaban.

*cae el muro*

Bajo los escombros ella sangraba, juraba nunca más.
Sobre los escombros, sin fuerzas y herido por la voluntad de destruir el muro. Él se retiraba a curarse.

La vida siguió, como suele seguir. Y cambiaron, vivieron, pero no olvidaron. Como suele suceder, el amor no se va, el tiempo, la calma los hizo mejores en lo suyo. Pero los recuerdos no cambian, seguían recordando... recordando-se...

Tercera Parte

Él vivió su vida, con sus problemas, incluido en el que ella lo sorprendió. Sintió como si el karma le estuviera pagando por su mala suerte. Ella que lo conocía, ella le dijo, ella le recordó que lo amaba.

Y fueron sinceros, otra vez. Sin embargo, nada sé de ella, quizás el karma trabajo al revés. Le trató mal.
Y se perdieron

Ella se retiró detrás de aquel muro, que había vuelto a construir, dónde más segura se siente. Él se encontró con el muro de nuevo, y como todo caballero le presentó sus respetos. Pero vio diferente, y él le amo. Con el mismo fuego con el que la amaba, amó al muro con el que ella se protegía del mundo y de él.

Ya no le haría daño, y serían felices. Pero como con cosas sencillas, el amor se vuelve algo como el odio. Él odió su muro, que la mantenía segura y sola, sin el calor de un abrazo. Un abrazo que él también necesitaba.

Y como es la vida, de maestra, el muro no cayó, pero fue superado, llegó donde ella estaba. Pero no fue lo mejor, porque dentro de esos muros solo puede haber silencio. Y él no puede callar.

Un mundo de ambos, donde están. Un mundo que cae y se levanta en el mismo instante. Por culpa de él, por culpa de ella. Aunque ese mundo sea más de ella que de él, ahí quiere lograr quedarse, tal vez logra cambiar el silencio.




Y es que vale la pena amar. Porque ser feliz no es fácil. Y no hay final, aunque llegue. Porque los círculos empiezan, pero nunca terminan.

*Espera la próxima vuelta*

TENGO UNA VIDA ENTERA, PARA VIVIR ESTA VIDA MIL VECES...