Un encuentro

De Imágenes de Blogger

Alekz iba arrastrando los pasos, casi arrastrando su vida a la vez, por la acera... Se detuvo, bostezo y se restrego un ojo con la mano. Se detuvo el tiempo por un segundo, mientras entrecerraba los ojos y terminaba de bostezar.
Becky al verlo corrió y lo abrazó antes de que abriera completamente los ojos. Lo sorprendio aunque habian estado casi enfrente, y a pesar de que él iba ahi por ella. Alekz, aun estaba aturdido por la medicina, y el dolor de cabeza aun no habia cedido mucho.
Ella le sonrio, y le dijo: -me encanta verte asi. Pareces un niño pequeño al que debo cuidar.
Si hubiese sido otra persona se habria soltado del abrazo, por su inestable animo, pero estaba encadenado a esa sonrisa, con un mano le levanto la cara y observo detenidamente sus facciones de arriba a abajo como habia hecho incontables veces antes. Se detuvo en sus ojos, y se cambio el semblante devolviendole la sonrisa. Y poso de último su mirada en sus labios y se quedo impregnado con el recuerdo de aquella dulce sensacion de sus besos.
-Yo soy y siempre seré tu niño pequeño. Más cuando estoy enfermo como ahora. Y estornudo hacia un lado
- Siempre le quitas la magia a un momento romantico. Se aparto un poco de él y fruncio el seño, pero sus ojos brillaban expectantes.
- Hoy estoy cansado casi de muerte, lo siento Becky. Pero te quiero y me encanta tu sonrisa, lo sabes bien, es mi mejor medicina para los días malos. Ahogo sus deseos de besarla, por seguir viendo aquella sonrisa que se amplio y que como tantas veces le devolvia la esperanza, y las ganas de vivir y luchar.
- Si. Y me encanta escucharlo de tí. No me aburriría nunca.
Alekz se acerco a ella se agacho con malicia hasta casi rozar sus labios sintiendo su aliento, mientras sus ojos se cruzaron y mantuvieron la mirada uno sobre el otro, ella se acercaba lentamente, que parecia no moverse. Él sonrió, y rápidamente beso la frente de Becky.
- Hoy parezco yo la niña, deseosa de un dulce, que no me quieren dar. Lo abrazo a la altura de las costillas, y él acomodo la cabeza de Becky entre su hombro y su cuello. No se movian, sintiendose el uno al otro. En verdad no necesitaban más, y el día empezaba a iluminarse para Alekz.
- No quiero que te resfries por mi culpa. Y mira que no sabria cuidarte como me cuidas tú.
- Eso no me importa.Y yo puedo cuidarme sola. Repuso.
- A mi si. Y no soportaria verte con mi aspecto. El universo me castigaría por hacerte algo asi.
- No te hagas de rogar tú y yo sabemos que ambos lo deseamos. No te preocupes, el amor le gana a cualquier adversidad.
- Que sea pequeño. Sus rostros uno frente al otro de nuevo y ambos cerraron los ojos.
Los que les observaban, solo vieron un dulce beso. Para ellos fue, un momento eterno. Donde rememoraban, aquel primer beso. Y la distancia y el tiempo que los separaba por momentos, hacian como si nunca hubiesen existido.
El amor los tenia asi. No necesitaban mucho tiempo, no necesitaban muchas palabras. Solo necesitaban el uno del otro. Becky, olvidó sus preocupaciones. Alekz, se sintio revivir, y agradeció una vez más al universo por poder compartir su vida con la de ella.
Sonrieron uno para el otro, y se separaron, con un pesar inmenso en sus almas y una satisfaccion infinita en el corazón; pronto se volverian a encontrar. Pero por el momento, el destino los guiaba por caminos separados...